Iconografía Barranco

Valle del agua

El Jerte es el Valle del Agua, la unión entre valle y río es tal, que les lleva a compartir hasta el nombre. El río nace en la cabecera del Valle próximo al puerto de Tornavacas, un humilde origen para una auténtica fuerza de la naturaleza, sobre la que se sostiene la vida de esta comarca. Valle y río no se pueden entender sin la red de arroyos y gargantas que los alimentan, formando un sistema hídrico de sangre transparente que circula valle abajo buscando su camino entre imponentes murallas de roca. Esa lucha de milenios ha conformado una suerte de intrincados laberintos, donde se esconden un puñado de espacios geográficos singulares: Las Gargantas del Jerte, auténticos tesoros geológicos y medioambientales. Asomarse a este sendero de agua y roca, es hacerlo al mismo corazón e historia de este Valle a los pies de la Sierra de Gredos. Un viaje que nos conducirá a rincones donde la belleza natural se muestra en todo su esplendor.

Caminos del agua Arroyo Dehesa Vadillo

Arroyo Dehesa Vadillo

El Arroyo de la Dehesa de Vadillo se despeña por una risquera plagada de buitres, recibiendo las aguas de las cumbres de Traslasierra, de la cara sureste del pico Valdeamor.

Junto al Risco de Cabeza Merina y la Garganta de los Buitres, nos muestran una combinación de riscos graníticos, aves de roquedo, bosques de roble melojo, cultivos de castaño y cerezo, bosquetes de ribera (de alisos, fresno y sauces) y por supuesto, un espectacular y poco conocido salto de agua: el Salto del Arroyo Dehesa Vadillo, que tiene su momento de mayor esplendor en la época de lluvias y deshielo.

Enclave Mediambiental

Estamos en la zona occidental de la vertiente sur de la Sierra de Gredos, en las faldas de los montes de Traslasierra, que separa el Valle del Ambroz del Valle del Jerte, donde nos encontramos. Estamos en uno de los pocos espacios de Extremadura donde está representado el ecosistema de montaña con sus excepcionales características físicas y naturales: paisaje de alta montaña de gran belleza y fragilidad, amplia red hidrográfica con una morfología de grandes saltos, cascadas y gargantas encajadas que desembocan en el río Jerte, bosque de galería, fauna y flora con endemismos propios y especies en peligro de extinción; todo un conjunto que lo hace único.

En este mirador, nos encontramos en un espacio protegido europeo, el LIC "Sierra de Gredos y Valle del Jerte", relativo a la conservación de los hábitats naturales, la flora y fauna silvestre. Las frías cifras nos hablan de 150 especies de aves (120 nidificantes), 14 de anfibios, 23 de reptiles, 56 de mamíferos y cientos de plantas e invertebrados, entre estos, más de 100 especies de mariposas.


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